NUEVAS RESPONSABILIDADES, MENSAJE PSICOGRAFIADO

31.05.2010 18:12

 NUEVAS RESPONSABILIDADES

 

Hijos del Alma:

Que Jesús nos bendiga.

             El siglo XXI continúa colgado de la más alta tecnología rompiendo los indefinidos horizontes de la ciencia.

             Antiguos misterios del conocimiento son revelados. Enigmas, que permanecían incomprendidos, son descifrados, y el materialismo sonríe burlonamente del mensaje sublime del amor.

           Paradójicamente, los avances respetables en estas áreas del intelecto no logran modificar las situaciones traumáticas que en la actualidad tienen lugar en el mundo. En el auge de las conquistas de la inteligencia, permanecen las convulsiones sociales unidas a las convulsiones planetarias en el momento de la gran transición que atraviesa la Tierra tan amada por todos nosotros.

           De un momento a otro, una erupción volcánica rompe las capas que ocultan el magma y las cenizas, arrojadas a mas de 10 mil metros de la superficie terrestre, modifican todo el paisaje europeo, amenazando las comunicaciones, la movilidad, mientras que se

piensa en otras y continuas erupciones que pueden venir acompañadas de gases venenosos o por lava incandescente ………

         Fenómenos de tal monta pueden ser detectados, mas no impedidos, demostrando que el vacío de la inteligencia no

puede superar la sabiduría de las leyes cósmicas establecidas por Dios.

             Y Gaia¹ - la gran madre planetaria – se retuerce, mientras que en su superficie la violencia irrumpe en cascadas, amenazando la estabilidad de la civilización: política, económica, social y, sobretodo, moral, caracterizando a estos como los días de la antigua Sodoma y Gomorra según las anotaciones de la Biblia…

            Se podría creer que el caos sería la conclusión final inevitable, mientras, la barca terrestre que navega los horizontes inmensos del cosmos no se encuentra sin rumbo definido.

            Jesús está en el timón y sus arquitectos divinos comandan los movimientos que le producen la alteración de la masa geológica mientras se operan las transformaciones morales.

Iniciada la nueva era, surge, en este mismo siglo XXI, el periodo de precursores de paz, de la fe religiosa, del arte y la belleza, del bien y del deber.  Señalando este periodo de transformación estamos invitados , encarnados y desencarnados, a contribuir a favor del progreso que nos llega en forma compleja pero bien direccionada.

           Avancemos con las huestes del Consolador en la dirección del puerto del mundo de regeneración. Sean nuestras acciones señaladas por los representantes de Jesús, de tal forma que se definan las directrices comportamentales.…Y que todos puedan identificarnos por la manera como enfrentamos problemas y angustias, testimonios y holocaustos, a semejanza de los primeros cristianos que vivieron, guardadas las proporciones, en periodo equivalente, instaurando en la Tierra el Evangelio libertador, desfigurado en estos últimos diecisiete siglos, en cuanto con Allan Kardec, surgió el Consolador trayéndonos de vuelta a Jesús.

              Por tanto, es comprensible que los Espíritus comprometidos con un pasado delictuoso intentan implantar el desorden, establecer el desequilibrio de las emociones para que pontifique el mal, en la versión mitológica de la perturbación demoníaca.

             En nombre de la luz inextinguible de aquellos días trascendentales de Galilea,  particularmente durante la sinfonía

incomparable , de las bienaventuranzas, demostremos que la nuestra es la fuerza del amor

y nuestras reflexiones en el mundo intimo trabajan para nuestra iluminación.

              En los días actuales, como en el pasado, amar es ver a Dios en nuestro prójimo; meditar es encontrar a Dios en nuestro mundo interior, con el fin de esparcir la caridad en la dirección de todas las criaturas humanas.

            Trabajar, por lo tanto, el mundo interior, no temer cualquier amenaza de la naturaleza calamitosa a través de las grandes destrucciones que hacen parte del progreso y de la renovación, o aquellas de dimensión no menos significativa en la intimidad doméstica, en los conflictos de sentimientos, demostrando que la luz de Cristo brilla en nosotros y nos conduce con seguridad.

            Eurasia, cansada de tantas guerras, de destrucción, de ceguera materialista, de los contínuos holocaustos de razas y de etnias, de gobiernos arbitrarios y perversos, clama por Jesús, como el mundo todo necesita de Jesús. Sus emisarios, de Krishna a Baha’u’llah, de Moisés a Allan Kardec, de Buda a los peregrinos de la no violencia, de Mahoma a los pacificadores Musulmanes, todos ellos, ministros de Jesús, le prepararon a través de dos milenios, el camino para que a través del Consolador – incluso sin cambios de directrices filosóficas o religiosas – predomine el amor.

          Sean celebradas y vividas la creencia en Dios, en la inmortalidad, en las vidas o existencias sucesivas, haciendo que las criaturas se den las manos construyendo el mundo de regeneración y de paz por el cual todos anhelamos…

            Jesús, hijos míos, ayer, hoy y mañana, es nuestra brújula, el es nuestro puerto y la nave que nos conduce con seguridad a plenitud.

            Porfiad en el bien a cualquier precio. Una existencia corporal, por más larga, es siempre muy breve en el reloj de la inmortalidad.

          Sembrad, por tanto, hoy el amor, redimiendo los equívocos del ayer con seguridad, ahora, en la certeza de que estos son los días sublimes del gran cambio para mejor.

           Aun verteremos mucho luto, escucharemos muchas profecías alarmantes, pero la Tierra saldrá de este proceso de transformación

más feliz, más depurada, con sus hijos dichosos con rumbo hacia un mundo superior en la escala evolutiva.

          Saludamos a todos los compañeros de los diversos países aquí reunidos, en nombre de los Espíritus que hacen parte del equipo del Consolador, suplicamos al Maestro inolvidable que nos siga bendiciendo con su paz, con la seguridad de que con El –el amor no amado – venceremos todos los obstáculos.

          Mucha paz, hijos del alma y que Jesús permanezca con nosotros.

          Son los votos de este servidor paternal y humilde de siempre,

                                                                           Bezerra.

 

 

(Mensaje psicofónico recibido por el médium Divaldo Pereira Franco, en la mañana del día 9 de Mayo del 2010, en el Encuentro del Consejo Espírita Internacional, reunido en Varsovia Polonia.